El pasado Viernes 21 de Marzo tuvimos el tan esperado   “Día del Ajedrez del Colegio Altamira”, dentro del “Proyecto de Ajedrez Educativo de la Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria”.
Se trataba de aproximar desde un punto de vista formativo el mundo del Ajedrez y su alto valor como patrimonio cultural inmaterial, pero también queríamos que actividades puramente ajedrecísticas estuvieran presentes y que en la medida de sus conocimientos los alumnos se involucraran en las actividades.
La víspera tuvimos la inesperada noticia de la visita del I.E.S. Miguel Herrero  de Torrelavega que se sumaba al evento con Juan Carlos y Raúl que capitaneaban a un grupo de 18 alumn@s de 1º y 2º ESO y nos dispusimos al recibimiento.
Intentamos comenzar puntualmente y a las 8: 45 ya teníamos montado el “Ajedrez Gigante Lebaniego” , todo listo .
Cuentacuentos en todos los niveles, partidas magistrales, problemísticos, cine , teatro, danza, cocina, arte y ajedrez, ordenadores, partidas rápidas, partidas simultáneas…..
El programa de actos era ambicioso y necesitaba de la sincronización de todo el centro, parece que el asunto funcionó adecuadamente , aún así algunas actividades lucieron destacadamente sobre el fondo, como por ejemplo “El ajedrez Gigante Lebaniego” ,“El Turco” de Mariano , “La performance “de Mónica y “La exhibición de partidas rápidas” entre otras.
Las opiniones compartidas al acabar la jornada eran estupendas, hemos disfrutado de una experiencia sensacional y el impacto sobre el alumnado dejará huella en su formación.
El reto está en canalizar este impulso motivador incrementando  la formación ajedrecística en lo que queda de curso y proyectarnos en el futuro.
Nuestro agradecimiento a cuántas personas e instituciones han colaborado en esta experiencia educativa, Servicio de Inspección Consejeria de Educación de Cantabria, Ayto. de Camargo, Club Ajedrez Al Mas´Odi , Asociación de Familias del Colegio Altamira y en particular a Enrique Baliñas, Víctor Gómez, Agustín Agudo, José Sanemeterio, Pepe Hurtado que aunque no pudo llegar contribuyó en asesoramiento y animo constante, y a los profesores del I.E.S Juan Carlos, Raúl a los que pusimos a trabajar como si fueran otros miembros de la plantilla del centro.